- El Hospital Sagrado Corazón lidera una de las cinco experiencias piloto de reconversión de salud mental en Cataluña
- El PSI+ consiste en llevar a cabo un tratamiento asertivo comunitario, centrado en las necesidades del paciente y ajustado en intensidad de forma personalizada.
- El Espacio Ágora es un espacio flexible para crear y fomentar los vínculos con los Servicios de Rehabilitación Comunitaria
- El Programa de recuperación funcional de alta intensidad ofrece una atención individualizada y un bajo nivel de exigencia de las actividades, adaptadas temporalmente y en intensidad a las capacidades de las personas participantes
Dentro del proceso de reconversión de las unidades de larga estancia de salud mental impulsado por el Departament de Salut, el Hospital Sagrat Cor puso en marcha, en junio, la unidad funcional de recuperación y proyecto de vida, que forma parte de una de las cinco experiencias piloto que se están desarrollando en Cataluña.
Este proceso implica un cambio de modelo basado en la potenciación de los servicios comunitarios para evitar los ingresos de larga duración en cinco territorios piloto, uno de ellos el área de influencia del CSMA de Martorell, donde las personas afectadas por un trastorno mental con condición de complejidad reciban los apoyos necesarios para poder vivir en la comunidad sin necesidad de ingresar en la larga estancia hospitalaria.
Así, el objetivo de estas unidades funcionales de recuperación y proyecto de vida es garantizar la autonomía y el proyecto de vida independiente en la comunidad de este colectivo de pacientes.
Enfoque integral a través de programas transversales y siempre respetando la voluntad del paciente.
Toda persona atendida en una unidad funcional contará con una serie de intervenciones simultáneas en los diferentes programas que configuran la unidad funcional y que se basan en un refuerzo del Plan de Servicios Individualizados (PSI+);¡, la creación del Espacio Ágora y un programa específico de recuperación funcional de alta intensidad de los Servicios de Rehabilitación Comunitaria (SRC).
El PSI+ consiste en llevar a cabo un tratamiento asertivo comunitario, es decir, un acompañamiento intensivo del paciente desde la comunidad, evaluando sus necesidades, realizando un plan de recuperación individual, y proporcionando un tratamiento integral de salud mental en el entorno social y natural de las personas, centrado en sus necesidades y ajustado en intensidad de forma personalizada. Este programa lo llevan a cabo tres profesionales del Hospital Sagrado Corazón: un educador social, una trabajadora social y un enfermero, quienes se reúnen dos veces por semana para compartir casos. Así mismo, la unidad funcional de recuperación y proyecto de vida tiene como consultor a un psiquiatra que estará dedicado, especialmente, al PSI+.
“Espacio Ágora” se entiende como un espacio abierto de baja exigencia, dirigido a personas usuarias sin vinculación con los servicios comunitarios y de uso flexible, el cual debe permitir y garantizar la posibilidad de trabajar las actividades de la vida diaria básicas (higiene, vestir y alimentación) e instrumentales. El objetivo final de este espacio es posibilitar una adherencia y vinculación progresiva de la persona usuaria a los servicios de salud mental, a los de atención primaria y a aquellos recursos sociales que sean necesarios para facilitar su integración en la comunidad.
Se prevé que el Espacio Ágora de la Unidad funcional liderada por el Hospital Sagrado Corazón se ubique en el SRC de Martorell y que cuente con los elementos necesarios para que las personas usuarias puedan desde tomar un café, hacer alguna comida caliente, hasta realizar su higiene personal. En el espacio trabajarán cuatro integradoras sociales (dos en turno de mañana y dos de tarde).
El tercer elemento de estas unidades funcionales es el Programa de recuperación funcional de alta intensidad, donde se ofrece una atención individualizada y un bajo nivel de exigencia de las actividades, adaptadas temporalmente y en intensidad a las capacidades de las personas participantes, teniendo en cuenta las dificultades que presentan al seguir los programas y actividades del SRC.
“Es esencial que tengamos en cuenta que debemos ajustarnos de manera flexible a las intervenciones asistenciales que requiere la persona en cada momento, desde una perspectiva multidisciplinaria y respetando siempre su voluntad, con el fin de fomentar su proceso de recuperación, la reinserción social y la mejora de la calidad de vida”, afirma Carlos Márquez, referente responsable de la nueva unidad funcional de recuperación y proyecto de vida.
Cualquier dispositivo territorial, previo acuerdo con los referentes del CSMA de la persona usuaria, podrá solicitar la inclusión de la persona afectada en la unidad funcional. La previsión inicial es que la unidad funcional atienda entre 10 y 15 pacientes simultáneamente y que el período de intervención tenga una temporalidad no superior a 2 años.
Los profesionales del Hospital Sagrado Corazón que participan hoy día en este espacio multidisciplinario que constituye la unidad funcional de recuperación y proyecto de vida son el coordinador de la unidad, Carlos Márquez (enfermería), Ismael García (educación social), Marta Escorigüela (trabajo social) y Estefania Cortés (integración social).